Claves para aliviar la indigestión tras los excesos alimenticios

Llegó la época navideña y con ella las celebraciones en las que no puede faltar la familia, los amigos y, por supuesto, la buena comida. Según la Fundación Cardiovascular de Colombia, durante las cenas navideñas se suele ingerir el doble o hasta el triple de la cantidad de comida recomendada para una persona por día. Es decir, es muy fácil que en medio de las festividades comamos en exceso, lo que puede causar indigestión, también conocida como dispepsia. En esta ocasión hablaremos de esta afección, cómo aliviarla, qué alimentos sirven para mejorarla y cómo prevenirla.

¿Qué es la indigestión?

La indigestión o dispepsia es una molestia abdominal que se manifiesta durante o después de comer. Presenta síntomas como dolor en la parte superior del abdomen, sensación de llenura y ardor estomacal. “Puede ser consecuencia de comer demasiado o demasiado rápido, ingerir alimentos grasosos o comer en momentos de estrés” (Mediline Plus)

¿Qué hacer durante un proceso de indigestión?

Cuida lo que comes

Durante un episodio de indigestión es vital cuidar lo que se come. Lo recomendable es hacer comidas pequeñas que contengan proteína y fuentes de fibra como vegetales, frutas, legumbres y cereales. Estos “aportarán un alto contenido en fibra dietética a lo largo del día que ayuda a regular los movimientos intestinales y a evitar el estreñimiento” (según lo señala el Centro Médico Quirúrgico de Enfermedades Digestivas). También es importante evitar consumir grasas, picante y bebidas estimulantes, como café o alcohol, ya que empeoran la dispepsia.

Mastica bien y come despacio

Comer despacio y masticar bien los alimentos es fundamental para facilitar la digestión. En primer lugar, porque de la velocidad en la que se ingieren los alimentos dependerá el tiempo en el que se producirá la digestión. Además, porque si se come despacio mayor sensación de saciedad se tendrá, ya que esta suele aparecer transcurridos unos 20 minutos después de empezar a comer.

Ingiere suficiente líquido

El agua es fundamental para el mantenimiento de la salud. Participa en el proceso de digestión diluyendo los nutrientes de los alimentos y aumentando la sensación de saciedad (tal y como lo afirman el este artículo de Elseiver). Sin embargo, es muy importante no ingerir líquido en exceso, durante un proceso de indigestión, ya que puede generar náuseas y empeorar los síntomas.

Descansa lo suficiente

El sistema digestivo se beneficia del descanso, ya que le permite bajar la velocidad y reponer la energía necesaria para funcionar correctamente. Es recomendable realizar reposo intestinal, el cual consiste en consumir alimentos, cada 4 o 5 horas, bajos en grasas, carbohidratos y azúcares; así como también evitar embutidos y carnes rojas, ya que todos estos alimentos se procesan de forma más lenta y empeoran los síntomas de la indigestión. Meditar o practicar yoga también pueden ser beneficiosos para la salud digestiva.

Pancreatina y Simeticona para aliviar la indigestión

La combinación de pancreatina y simeticona es eficaz para mejorar la indigestión y aliviar sus síntomas. Ayuda a disminuir las molestías de la digestión pesada y facilita la expulsión de gases. La pancreatina posee enzimas digestivas (lipasa, proteasa y amilasa) que descomponen las proteínas, los lípidos y el almidón en pequeñas moléculas para que el cuerpo las absorba más fácilmente. La simeticona tiene efecto antiflatulento que actúa reduciendo la presión en la mucosa estomacal y así la hinchazón abdominal.

Importante: La pancreatina es una sustancia que el cuerpo produce de forma natural. Sin embargo, por diferentes razones, en algunas personas es insuficiente lo cual puede causar indigestión. Por esta razón, es beneficioso acudir a la suplementación de pancreatina y simeticona como opción terapéutica. La dosis recomendada varía de acuerdo a cada persona y a la evaluación médica.

Alimentos que sirven para mejorar la digestión

- Verduras y vegetales como la espinaca, la cebolla, los espárragos y la alcachofa, poseen una gran cantidad de vitaminas y minerales que ayudan a regular la función intestinal.