Estreñimiento, hablemos sobre él

El estreñimiento es uno de los problemas gastrointestinales más frecuentes, caracterizado por la dificultad para evacuar. Afecta a una parte significativa de la población mundial, aproximadamente al 15%, y suele ser más frecuente en mujeres.

En este artículo, exploramos sus causas, síntomas, factores de riesgo y formas de prevención y tratamiento.

Clasificación

Existen dos tipos comunes de estreñimiento:

Estreñimiento transitorio: se caracteriza por tener menos de tres evacuaciones a la semana, con síntomas ocasionales como heces duras y esfuerzo durante la defecación. Generalmente, es temporal y puede resolverse con cambios en la dieta y estilo de vida.
Estreñimiento crónico: es una condición más persistente que se manifiesta por semanas, meses o años. Se asocia con síntomas más severos como dolor abdominal constante, sensación de obstrucción rectal y necesidad de usar laxantes regularmente. Esta condición puede afectar significativamente la calidad de vida y requerir una evaluación médica más detallada para identificar y tratar causas subyacentes.

Causas

Las causas del estreñimiento son variadas y pueden dividirse en dos categorías:

Primarias:

Dieta baja en fibra.
Falta de actividad física.
Ingesta insuficiente de líquidos.
Hábitos de vida irregulares, como cambios en la rutina diaria o viajes.

Secundarias:

Trastornos en el funcionamiento del intestino grueso.
Trastornos endocrinos (hipotiroidismo, diabetes).
Trastornos neurológicos (Parkinson, esclerosis múltiple).
Uso de ciertos medicamentos, como opioides y antidepresivos.

Síntomas

Los síntomas más comunes incluyen:

Menos de tres evacuaciones por semana.
Heces duras o grumosas.
Esfuerzo excesivo durante la defecación.
Sensación de obstrucción rectal.
Sensación de evacuación incompleta.

Factores de riesgo

Edad: las personas con edad avanzada son más propensas a padecer estreñimiento, debido a un metabolismo más lento y menor actividad física.
Sexo: las mujeres, especialmente durante el embarazo y después del parto, tienen mayor riesgo.
Dieta y estilo de vida: dietas bajas en fibra y líquidos, así como la falta de ejercicio.
Condiciones médicas: enfermedades crónicas y ciertos medicamentos.

Tratamiento y prevención

Aumentar la ingesta de fibra (frutas, verduras, granos integrales).
Beber abundante agua.
Evitar alimentos procesados y ricos en grasas.
Realizar ejercicio regularmente para estimular el movimiento intestinal.
Establecer una rutina regular para ir al baño.
No ignorar la necesidad de evacuar.

Nota: Si estas medidas no son suficientes, en ocasiones es necesario usar laxante. Uno de los más eficaces es el polietilenglicol 3350 que funciona atrayendo agua hacia los intestinos, lo que hace que las heces sean más blandas y más fáciles de evacuar. Es crucial seguir las indicaciones del médico, al momento de tomar laxante, para evitar cualquier complicación.

¿El estreñimiento representa un riesgo para la salud?

En general, el estreñimiento no acarrea consecuencias graves.“Solo se asocian a él con frecuencia el desarrollo de problemas anales, especialmente hemorroides y fisuras, que aunque muy molestas, no ponen en riesgo la vida”, según se explica en un estudio sobre estreñimiento publicado en 2006 por la Revista Española de Enfermedades Digestivas.

Sin embargo, si el estreñimiento se asocia a signos de alarma es importante consultar al médico, ya que pueden indicar condiciones serias que requieren evaluación y tratamiento inmediato. Dentro de ellos destacan:

Cambio brusco en los hábitos intestinales
Dolor abdominal intenso que no mejora
Sangre en las heces
Pérdida de peso inexplicada
Síntomas de anemia como fatiga y debilidad
Fiebre sin causa aparente
Náuseas o vómitos persistentes
Inflamación abdominal significativa
Sensación de obstrucción o bloqueo al intentar evacuar
Heces muy delgadas o en forma de cinta

Asimismo, si se tienen antecedentes familiares de enfermedades gastrointestinales graves, como cáncer de colon o enfermedad inflamatoria intestinal, y si se experimenta debilidad, entumecimiento u otros síntomas neurológicos, es crucial buscar atención médica.

Fuentes: